Cómo mantener un aula de informática como el primer día
Es típico que un centro educativo exista sólo una, o como mucho un par de aulas de informática. Esto provoca que, a diario, por dichas aulas pases centenares de alumnos, que no se distinguen por tratar demasiado bien ni el hardware ni el software del aula. Los síntomas de desgaste del aula son muy habituales: virus, malware, ratones que no funcionan, CPUs que hacen ruido o se apagan súbitamente… el catálogo de afecciones de un aula compartida es prácticamente inagotable.
Por este motivo, desde Servinformática queremos ofrecer unos cuantos consejos a los centros de estudios para que puedan mantener sus aulas de informática en perfectas condiciones.
- En primer lugar, cabría mencionar el no abandonar al profesor de informática a su suerte. El mantenimiento de un aula de informática no es cosa sencilla. Suelen ser aulas de 15 a 50 ordenadores por las que a diario pasan cientos de alumnos, que descargan contenidos de Internet, conectan sus pendrives infestados de virus, o vapulean el ratón y el teclado. Por este motivo, no podemos dejar caer esta responsabilidad sobre el profesor de informática, se hace necesario el disponer de un equipo de mantenimiento profesional: un técnico, o varios. Se debe revisar el aula de forma periódica y responsable, no hay porqué esperar a que el problema se produzca, se puede prevenir.
- Otro punto de vital importancia es tener las máquinas con el sistema de seguridad bien configurado y actualizado. Cada uno de los ordenadores del aula debe tener su antivirus instalado y al día. De lo contrario, los virus llegarán, tarde o temprano. Lo mismo decir de los navegadores web. ¿Todavía usas Internet Explorer 6 en tu aula? Pues tienes muchas posibilidades de que por sus vulnerabilidades se cuelen todo tipo de troyanos, y a través de la red, contagien al resto de ordenadores.
- Es muy conveniente “congelar” los ordenadores, de manera que cuando se apagan y se vuelven a encender, éstos vuelvan a su estado inicial. Esto evita que los alumnos dejen sus archivos (que son potencialmente peligrosos) en el disco duro. También evitaremos que los usen como dispositivos de almacenamiento gratuito, o que les coloquen fondos de escritorio o salvapantallas de “dudoso” gusto.
- Por último, usa software original. Si no te puedes permitir la licencia de software para todo el aula, quizás puedas usar software de uso libre. Como puede ser, la suite ofimática de libre distribución Open Office, permite disponer de una suite de gestión semejante a Microsoft Office, descargándola gratuitamente de Internet. O tal vez puedas usar Ubuntuen lugar de Windows.
Si sigues estas recomendaciones básicas, tu aula de informática funcionará como la seda durante mucho tiempo. Y si no tienes tiempo o decides contar con servicios profesionales, siempre puedes ponerte en contacto con nosotros. ¡Estaremos encantados en ayudarte!